Aries es uno de los signos de los zodíacos más enérgicos y más activos a la hora de tomar una posición. La autoridad, la fuerza y cierto carácter impetuoso son algunas de las características que mejor lo definen. Por esto es que cualquier cosa que acontezca a un ritmo medianamente lento, inquietará a un ariano. En general tienden a ser muy posesivos y esto suele traerles grandes conflictos a nivel de pareja. Si eres un ariano debes ser consciente de esta característica que intentas negarla, si tu pareja es de Aries, entonces ten presente este defecto que puede darte muchos dolores de cabeza.
Aries y sus defectos al momento de amar
Si has escogido a un ariano o ariana como pareja, hay ciertas cosas que debes saber. Partiendo de que el amor para un nacido bajo Aries, es todo un reto y una conquista, por lo que cualquier cosa que ponga en riesgo ganar esa batalla enfurecerá a Aries. Los astrólogos suelen coincidir que el amante de Aries es uno de los más tiernos pero también puede ser tan pasional que asusta. Sus celos pueden llegar a ser incontrolables y llegan a tomar conductas totalmente extradimensionadas.
El romanticismo y una extensa conversación amorosa no es algo que le agrade, hay que ir directo al grano. En ocasiones puede resultar demasiado directo y generar incomodidad en la persona que está a su lado. No le importan las personas que puedan ser espectadoras de sus actos, hacer lo que desea hacer es su objetivo a como dé lugar. Cuando a un Aries se le pregunta acerca de sus sentimientos, suele resultar complejo a la hora de expresarse y puede resultarte un tanto entreverado. No te desesperes pues los arianos son sinceros y no van a engañarte, solo que la claridad de comunicación no está entre sus fortalezas.
Defectos de los arianos en el trabajo
Controlar su impulsividad debería ser el primer objetivo que debiera plantearse un ariano, pues esa es su gran debilidad. Si tuviéramos que contratar a un empleado de este signo, debemos avisarle desde el principio que el autocontrol es un valor que el jefe y la empresa valora. Aries es un signo proclive al liderazgo y esa es una gran virtud, pero rápidamente se ve disminuida cuando no logra controlar una conversación, por ejemplo, en la que expresa de manera demasiado directa una mala noticia.
Si se trata de empleos en los que se requiere diplomacia y elegancia en el trato, Aries deja mucho que desear. Aunque se esfuerce no logra controlar su impulsiva forma de hablar y no sabe medir las consecuencias de una palabra hiriente por ejemplo. Otro aspecto vinculado a las tareas que implican manejo de personas y toma de decisiones complejas, es que un ariano no suele controlar con éxito una discusión. Independientemente del nivel cultural, Aries tiene grandes dificultades para resultar empático, ponerse en el lugar del otro y matizar una discusión que va subiendo de tono. Si bien puede ser honorable defender una posición o una convicción, lo que no puede hacer Aries, es medir y dosificar la fuerza con la que hacen ciertos planteos. Digamos que la gran energía que posee no puede capitalizarla a su favor.
